En la vida del campo la temporada empezaba a finales de octubre con la sementera, y volvía a reiniciarse pasadas Las candelas, con la siembra de la cebada y la avena.
Autor: Eutiquio
Final de la serie ‘El Pueblo’.
Final de la serie ‘El Pueblo’. Alberto Caballero anuncia que estudia con Caja Rural de Soria abrir Valdelavilla "no solo para visitas, también para que os podáis alojar en las
Edina, la cabrera
En ocasiones recordamos haber vivido una anécdota mínima, y transitamos con ella por donde quiera que vayamos. A veces ni siquiera sucedió de verdad, aunque creamos recordar hasta sus últimos detalles.
Marzo despierta del invierno que acaba.
Llegado marzo, creemos que hemos dejado atrás las borrascas del invierno, pero el tiempo sigue siendo inestable, y era importante tenerlo presente en los trabajos cotidianos para evitar sus consecuencias.
Asentada ascendencia.
El lugar de nacimiento condiciona toda nuestra vida asociándolo a las personas de nuestra familia, nuestras primeras experiencias y los paisajes que conformaron nuestros recuerdos de infancia. Puede denominarse impronta.
Los albores de la luz eléctrica en el Coto Redondo.
El servicio eléctrico empezó a funcionar en nuestros pueblos a lo largo del siglo pasado, resultando aún posible rememorar la revolución del paso de los sistemas de iluminación tradicionales a los modernos.
Febrero, a medias entre el invierno y el buen tiempo.
El segundo mes del año destaca por la variedad del tiempo, alternando días de sol con otros nublados, dependiendo las tareas diarias de lo que buenamente pueda ir haciéndose.
La cuesta de enero en nuestros pueblos.
Las labores del campo se ajustaban al ritmo de la tierra, y cada época del año ocupaba a hombres y mujeres en las tareas propias del calendario, unas ellas y otras ellos.
FELIZ NAVIDAD
Que paséis unas felices fiestas navideñas con vuestros seres queridos, y que el año próximo sea generoso en proyectos y sueños. Paz y amor para todas las personas de buena voluntad.
Macrogranjas, una trampa mortal para los pueblos pequeños.
Cien años después de que nuestros abuelos comprasen el pueblo a un terrateniente, volvemos a sufrir el peligro de que fuerzas foráneas quieran colonizarnos con métodos modernos tan impositivos como aquello