Cuentos de un Pueblo con Picota

Cuentos de tierras sembradas y tierras liegas

Ya han pasado casi dos años desde la publicación de Cuentos de un pueblo con picota, y es el momento justo de pensar en publicar otro libro que ayude a seguir dando a conocer nuestras costumbres y la forma de vida de los que vivieron en el pueblo antes que nosotros.

Esta vez nos gustaría que el nuevo libro esté escrito por muchos, por todos los que quieran participar y se les dé bien escribir aunque nunca hayan publicado nada.

Todavía no hemos decidido el título que tendrá el libro ni tampoco qué editorial lo publicará ni las condiciones de hacerlo, pero estamos empezando a recibir el apoyo de algunos editores a los que se lo hemos propuesto, que creen que puede ser bien acogido por las librerías sorianas.

La idea en un principio es que lo hagamos entre diez y quince personas de los cuatro pueblos a ser posible, o familiares que vivan fuera y conozcan esto por haber estado de vacaciones o habérselo oído contar a sus padres o a sus abuelos. Cada uno podremos escribir un par de cuentos, tres o cuatro como mucho, sobre las cosas que nos parezcan mejor y creamos que puedan interesar también a los lectores de otros sitios, pensando en que el libro procuraremos venderlo también en distintos pueblos de Soria y de fuera de nuestra provincia.

Los escritos pueden ser cuentos y relatos, poesías, anécdotas argumentadas o refranes y aforismos que sólo se empleen en nuestros pueblos y que no se oigan fuera, siempre que no se trate de trabajos de tipo histórico, estudios demográficos ni otros documentos de investigación que son asunto de otro tipo de publicaciones.

Los que estéis interesados podéis escribirme a mi correo electrónico, que es eutiquio@cabrerizo.es o eutiquio@ono.com y si queréis me dais vuestro número de teléfono para informaros con más detalle de lo hecho y ponernos de acuerdo en los temas concretos sin que os cueste dinero.

Escribir un libro sobre la vida de nuestros pueblos, recogiendo todas aquellas cosas de las que nos acordamos nosotros pero que es posible que no lleguen a conocer nuestros descendientes es de alguna forma como preservar el pasado para que de algún modo permanezca en el futuro y no pase todo al olvido, para que los que vengan después de nosotros conozcan los afanes de los que sembraron los chopos y los árboles del monte, levantaron las casas, roturaron las tierras y abrieron los caminos que hoy tenemos. Escribir que si hoy en día vivimos con las comodidades que vivimos es gracias a que antes otros trabajaron en peores condiciones que nosotros y que no fue inútil su esfuerzo.