Con independencia de las razones que le decidieran a tomar la iniciativa de procurar la compra de los pueblos al conde de Adanero, que pudieron ser religiosas y sociales al mismo tiempo, D. Juan José de Pablo Romero, cura del Burgo hijo de la santervasina Lorenza Romero, consiguió alcanzar su propósito el día 2 de abril de 1924, liberando con ello a los vecinos de los cuatro pueblos de la dependencia abusiva que venían padeciendo desde el siglo anterior.
Ponemos aquí tres escritos que documentan bien lo que decimos: