Fuentes y manantiales

Cabría preguntarse cómo han llegado a abandonarse de esta forma pueblos con las posibilidades de explotación de agua, como Santervás, por ejemplo, con el paraje de La Vega, hoy casi baldío, y antaño cubierto de alubias.

Cuenta además esta aldea con unas ocho hectáreas de huertos, junto al núcleo de viviendas, propiedad de todos, sin concentrar, y que son regados por los manantiales; y están sin concentrar, según los vecinos, porque «cuando se quiso la parcelación hacer a unos les venía bien y a otros no, y se dejó como estaba; y ahora estamos arrepentidos porque hay personas que tienen hasta 10 piezas pequeñas, huertecillos, cada uno en un sitio distinto».

El río Cejos

Tres ríos nacen en esa zona de la provincia, a escasa distancia unos de otros. Mientras el Perales surge de los relevantes manantiales de Fuencaliente del Burgo, el Cañicera lo hace en el límite de este término y el de Guijosa, y el Cejos, en Santervás, concretamente del de Los Ojos, que aunque en epocas de sequía no mana, se alimenta en su camino de otros manantiales mas pequeños del lugar.

Su recorrido es corto, pues sólo contornea el término de Santervás por el Sur, y, agregándose, entre Fuentearmegil y Zayuelas al río Perales, para juntos buscar al Duero ya en tierras de Aranda. Excepto el arroyo de La Veguilla, que le llega al Cejos por su margen izquierda, y que desciende desde Fuencaliente en su linde con Santa María de las Hoyas, el Cejos recibe el agua de los pequeños fontanares que manan en el mismo lecho fluvial.

El agua en Santervás llega de dirección Norte, de la zona de la sierra de Nafría. Se consideran, según el mapa de recursos elaborado por el Instituto Geominero formaciones cretácicas semejantes a las de la sierra de Cabrejas». Se trata de tres manantiales, a escasa distancia entre sí, lo que hace pensar que en situaciones climatológicas favorables, toda el área se convertiría en una gran laguna.

Se ubican en el paraje de Dos Huertos, pequeñas piezas muy divididas, en las que es posible, a pesar de los 990 metros de altura, conseguir hortalizas en abundancia. Muy cerca de Dos Huertos, o como prolongación de los mismos, La Vega, estuvo épocas atrás sembrada de alubias y regada con las aguas de los manantiales.

La primera fuente que nos enseñaron Felipe Carro, Santos Muñoz, Valentín Romero y Vicenta Romera, fue la llamada de La Mediana, en forma de ojo de pequeña circunferencia, pero bastante profundo, y donde el agua mana formando górgoros a través de la arena del suelo. El agua es fina y fría y no parece arrastrada por caliza subterránea, aunque es presumible que así sea.

La Laguna se considera el manantial mas importante de Santervás, en forma de gran ojo, sí se le conoce el fondo, al contrario que el de Torreandaluz, por ejemplo. Al igual que el de Valdelinares o Fuencaliente del Burgo, su utilización más social para baño y para lavadero, motivo por el cual se limpia con mucha regularidad, para que las mujeres que acuden a el a lavar no se encuentren con el verdín que forma.

Junto con la Fuente de la Mediana riega las alrededor de 8 hectáreas de huertos y forma un arroyo que acude directamente a alimentar el río Cejos.

A continuación de La Laguna, la Fuente del Pueblo que hasta que se instaló el abastecimiento domiciliario era la encargada de realizar este servicio. Dos buenos chorros de agua fría salen de forma permanente, y aún se la llevan para beber a otros lugares próximos.

El agua del abastecimiento les llega de otro ojo, ubicado en el Vallejo Lobos, a dos kilómetros del pueblo. La resurgencia se halla debidamente cubierta, por lo que resulta imposible acceder a ella.

Ante estos copiosos manantiales, los habitantes de Santervás no dan importancia a las pequeñas fuentes dispersas por el término municipal, aunque aseguran que en muchos lugares ya se conformarían con ellas. Lo son en forma de cubillo, como es costumbre en esa zona de Soria, en un tronco de árbol vaciado y colocado recogiendo la salida del agua para poder aprovecharla, también para el ganado. De ellas bebió siempre el vecindario cuando acudían a hacer las labores del campo; ahora también las usan los cazadores.

Por el Norte pueden encontrarse Valdelalobera, Las Charquillas y El Cuento. Por el Este la Matilla y Visleria. Por el Sur, Cubillo Barrancón y Valdepedro; hacia el Suroeste y por el Oeste, Valdehondillo.

Fuencaliente del Burgo, drenaje de la sierra de Nafría

Por la carretera provincial que discurre desde Fuentearmegil, ayuntamiento al que pertenece, junto con Zayuelas y Santervás, se accede a Fuencaliente del Burgo, situado a 979 metros de altitud, y que debe su nombre al manantial de La Ermita, cuyas aguas manan a temperatura cálida, inalterable en cualquier época del año, de las entrañas de la tierra. Procede de la sierra de Nafría, y drenan, además de por este manantial, por otro conocido como La Balsa.

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